Hay ocasiones en las que la comida sabe tan bien que simplemente no queremos que se acabe, te aseguramos que esto te va a pasar cuando visites las Costillas de San Luis en la Roma.
Las costillas de res son amigas de todos, igual que la cecina enchilada; sobre todo si va en taco de tortilla hecha a mano, con su limón, su salsita martajada y sus frijolitos.
Lánzate a Las Costillas de San Luis en la Roma y ve con hambre porque los platos son gigantes y deliciosos.
Las Costillas de San Luis en la Roma es un restaurante muy querido, en parte porque no ha cambiado su sazón desde que abrió en 1975 y lo mejor de todo es que aún tiene su esencia de restaurante familiar.
No hay tantísima variedad en el menú pero ya saben lo que dicen “de lo bueno, poco.”
Aquí podrás encontrar: las costillas de res en $120 pesitos, son las favoritas, pero también tienen Rib Eye en $185, T-bone en $185, cecina a $147, chuleta en $120 y pechuga de pollo en sólo $147.
Cada corte de carne va acompañado de frijoles calduditos cortesía de la casa, tortillas hechas a mano, cebollitas y nopales, salsa martajada verde, roja o mexicana y una guarnición a elegir: huarache, quesadilla o una enchilada.
Sí, te servirán un plato gigante.
Pero nosotros te recomendamos echarte un pulque embotellado esta bara bara pa’ la banda, en $40. Así como lo oyes, es un pulque en botella de vidrio, en presentación de 350 mililitros de diferentes sabores: guayaba, piña, natural o moras.
Si todavía te quedó un huequito puedes comerte unas ricas fresas con crema y flan napolitano, dos antojos dulceros que cierran con broche de oro una comida bien sabrosa.
Las Costillas de San Luis en la Roma abren todos los días de la semana, sin embargo, el mejor día para ir son los fines de semana.
Fuente: Chilango